lunes, 3 de octubre de 2016

Tragedia: murió un niño de 4 años tras caer al río Atuel

El pequeño Bruno Villalobos se encontraba con su familia en el complejo de cabañas, jugando en cercanías del cauce del río. La consternación se adueñó de todos cuando perdieron de vista al niño y comenzó la desesperada búsqueda, con el terrible desenlace de encontrar el cuerpo del menor dentro del río.
 
Un pequeño de apenas cuatro años murió ayer tras caer a las aguas del río Atuel a la altura del kilómetro 26 de la ruta 173.
De acuerdo a la información oficial, Bruno Santino Villalobos se encontraba con su familia en el complejo Cabañas del Sol en Valle Grande. Pasadas las 13 horas del domingo, cuando se encontraban almorzando a la vera del río, advirtieron que el menor jugaba en cercanías del cauce. La consternación se adueñó de todos cuando, repentinamente, perdieron de vista al niño y comenzó la desesperada búsqueda.
Según pudo saber Diario San Rafael, los familiares de Bruno solicitaron ayuda a otras personas mientras aguardaban la intervención de la policía. Cuando comenzó el operativo, los uniformados dieron cuenta de la peor de las posibilidades, ya que el cuerpo del niño yacía sin vida en el interior del río, a la altura del camping del Movimiento Familiar Cristiano.
Si bien personal de la fuerza apeló a la realización de técnicas de resucitación, el doctor Maximiliano Fernández, a cargo del interno 141 del Servicio de Emergencia Coordinado, constató el deceso del pequeño Bruno.
 Se vivieron momentos de dolor ante la desgarradora noticia en los familiares de Santino, quienes no pudieron evitar la tragedia, ocurrida –tal como relataron- “de un momento a otro”.
Más allá de no iniciarse aún la temporada de verano en Valle Grande, el domingo fue una jornada cálida en la que muchos sanrafaelinos aprovecharon para estar al aire libre y disfrutar de un asado entre familiares y amigos. Lamentablemente, como viene sucediendo en el último tiempo, estas condiciones generaron una nueva tragedia.
En este marco, pedir que cada camping cuente con un cuidador o guardavidas, y aumentar los recursos de la Policía y los sistemas de emergencia será clave, pues antes de empezar el período estival ya debemos lamentar una víctima. Y para que no se repita, los responsables de evitarlas deberán apelar a todas las herramientas que sean necesarias.
Cabe recordar que Valle Grande fue noticia en febrero pasado, cuando tuvo repercusión nacional la muerte de Rodrigo Osorio, que murió ahogado mientras se encontraba en una excursión con integrantes del Tabernáculo de Vida y Paz. El chico fue perdido de vista por sus amigos en el embalse Valle Grande. La ausencia de Osorio fue advertida bastante más tarde, y dio lugar a un amplio operativo que terminó con el hallazgo del cuerpo.
Apenas dos meses antes del fallecimiento de Osorio, Pablo Germán Gómez Quiroga, de 18 años, murió ahogado en el lago chico mientras lo cruzaba a nado junto a unos amigos, quienes declararon que desapareció de la superficie. Cuando lograron sacarlo del fondo del agua, comprobaron que había perdido la vida. 


El pequeño Bruno Villalobos se encontraba con su familia en el complejo de cabañas, jugando en cercanías del cauce del río. La consternación se adueñó de todos cuando perdieron de vista al niño y comenzó la desesperada búsqueda, con el terrible desenlace de encontrar el cuerpo del menor dentro del río.
 
Un pequeño de apenas cuatro años murió ayer tras caer a las aguas del río Atuel a la altura del kilómetro 26 de la ruta 173.
De acuerdo a la información oficial, Bruno Santino Villalobos se encontraba con su familia en el complejo Cabañas del Sol en Valle Grande. Pasadas las 13 horas del domingo, cuando se encontraban almorzando a la vera del río, advirtieron que el menor jugaba en cercanías del cauce. La consternación se adueñó de todos cuando, repentinamente, perdieron de vista al niño y comenzó la desesperada búsqueda.
Según pudo saber Diario San Rafael, los familiares de Bruno solicitaron ayuda a otras personas mientras aguardaban la intervención de la policía. Cuando comenzó el operativo, los uniformados dieron cuenta de la peor de las posibilidades, ya que el cuerpo del niño yacía sin vida en el interior del río, a la altura del camping del Movimiento Familiar Cristiano.
Si bien personal de la fuerza apeló a la realización de técnicas de resucitación, el doctor Maximiliano Fernández, a cargo del interno 141 del Servicio de Emergencia Coordinado, constató el deceso del pequeño Bruno.
 Se vivieron momentos de dolor ante la desgarradora noticia en los familiares de Santino, quienes no pudieron evitar la tragedia, ocurrida –tal como relataron- “de un momento a otro”.
Más allá de no iniciarse aún la temporada de verano en Valle Grande, el domingo fue una jornada cálida en la que muchos sanrafaelinos aprovecharon para estar al aire libre y disfrutar de un asado entre familiares y amigos. Lamentablemente, como viene sucediendo en el último tiempo, estas condiciones generaron una nueva tragedia.
En este marco, pedir que cada camping cuente con un cuidador o guardavidas, y aumentar los recursos de la Policía y los sistemas de emergencia será clave, pues antes de empezar el período estival ya debemos lamentar una víctima. Y para que no se repita, los responsables de evitarlas deberán apelar a todas las herramientas que sean necesarias.
Cabe recordar que Valle Grande fue noticia en febrero pasado, cuando tuvo repercusión nacional la muerte de Rodrigo Osorio, que murió ahogado mientras se encontraba en una excursión con integrantes del Tabernáculo de Vida y Paz. El chico fue perdido de vista por sus amigos en el embalse Valle Grande. La ausencia de Osorio fue advertida bastante más tarde, y dio lugar a un amplio operativo que terminó con el hallazgo del cuerpo.
Apenas dos meses antes del fallecimiento de Osorio, Pablo Germán Gómez Quiroga, de 18 años, murió ahogado en el lago chico mientras lo cruzaba a nado junto a unos amigos, quienes declararon que desapareció de la superficie. Cuando lograron sacarlo del fondo del agua, comprobaron que había perdido la vida. 

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